Otra de las terapias holísticas es la aromaterapia, que emplea los aceites esenciales extraídos de plantas para inducir la armonía entre el individuo y su entorno. Así, a través del olor de dichos aceites, favorece la sanación natural de cuerpo y mente. Esto es posible gracias a la activación de varios receptores sensoriales distribuidos por el cuerpo. Los aceites de limoncillo, manzanilla, menta o de salvia se emplean comúnmente en este campo.